La imagen de Macri, un negocio de casi $40 millones que busca dueño

El presidente Mauricio Macri busca quien transmita oficialmente su imagen al país y al mundo en el año de las elecciones. El negocio, que araña los $40 millones y está abierto a empresas de todas las provincias, se teje en un nudo compuesto por las restricciones presupuestarias que impone el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, las necesidades proselitistas de Cambiemos y los avatares que enfrentan algunos socios privados del kirchnerismo como Cristóbal López , cuyas compañías estaban hasta hace poco a cargo de la tarea, pero perdieron terreno con el cambio de inquilino en la Casa Rosada y la situación judicial del empresario.
Mañana se abrirá la licitación convocada por la Jefatura de Gabinete para adjudicar el servicio integral de seguimiento de actividades presidenciales o de interés presidencial por seis meses, con opción a prórroga por el mismo período. De manera que llegará hasta diciembre, cuando Macri deba dejar el bastón de mando o retenerlo por otros cuatro años, según el resultado de octubre.

Según el presupuesto que le asignó el Gobierno, hay $37,35 millones disponibles para esa tarea. Se destinarán a cubrir los costos de los camiones y servicios asociados que se necesitan en cada ubicación por la que pase el Presidente. Está previsto que la mayor parte de las actividades se concentren en la ciudad y la provincia de Buenos Aires, pero también habría en Córdoba, La Rioja, Catamarca, Santa Fe, Misiones, Corrientes, Entre Ríos, Chaco, Formosa, Santiago del Estero, Tucumán, Salta, Jujuy, Neuquén, Chubut, Tierra del Fuego y hasta la Antártida. Y dado que la licitación no se adjudicará en bloque, pueden presentar ofertas empresas de varias provincias.

Los cambios en las transmisiones presidenciales encierran algunas ironías si se los mira desde la política. Sucede que Cambiemos, más identificado en términos ideológicos con la menor participación del Estado en la economía, sumó técnicos, equipamiento y contratos con empresas públicas para hacerse cargo de la mayor parte del trabajo que antes hacía una empresa privada. Esos servicios, en cambio, estaban íntegramente tercerizados en el kirchnerismo, más favorable a la intervención en la economía y a la idea de un Estado empresario.A la llegada de Macri, la productora La Corte se encargaba de las transmisiones presidenciales, entre otros trabajos. La empresa, que produjo y transmitió partidos del programa Fútbol Para Todos, fue creada en 1987 por los hermanos Pablo y Daniel Monzoncillo, que en marzo de 2016 le vendieron el 51% a López. El patagónico, de todas formas, dejó la gestión diaria a cargo de los fundadores.

Cambiemos le mantuvo el trabajo a la firma de López en el primer año de gestión, pero más tarde se enfrentó a una disyuntiva. En el primer trimestre de 2017 lanzó una licitación para volver a contratar el servicio, y la empresa presentó la oferta más competitiva. Por aquellos días, el Gobierno estaba enfrentado con el empresario kirchnerista por una deuda millonaria debido a la retención de impuestos a los combustibles, algo que finalmente lo llevó a prisión.
Después de dar de baja la licitación, el equipo de la Secretaría de Comunicación comenzó a hacerse cargo de trabajos que antes dejaba en manos de otros para quedarse con el manejo de las transmisiones: compró equipamiento, contrató de forma directa con la empresa pública Arsat el servicio satelital (los pagos antes triangulaban con una firma privada) e instaló una antena en el techo de Casa Rosada, donde también armó un pequeño control.
La transición estuvo a cargo de otra productora, Alma TV. El control estaba en Nuñez, y también se hacía cargo de los camarógrafos y directores.

Las primeras transmisiones con el equipamiento propio de Casa Rosada se hicieron en la reunión del G20 , en diciembre pasado. Por eso, la nueva licitación apunta a contratar específicamente los servicios de camiones de exteriores, algo que el Gobierno quiere mantener tercerizado. De manera que, si Macri participa, por ejemplo, de un acto en Neuquén, la imagen llegará desde esa unidad hasta Casa Rosada, que resolverá la transmisión para la televisión y Youtube.
El Gobierno sostiene que logró bajar los costos de las transmisiones presidenciales. En 2017, la empresa de López presentó la oferta más competitiva y pedía $58 millones por todos los trabajos más que el último presupuesto oficial aprobado para contratar camiones-, con una inflación menor a la actual y una moneda más fuerte que la de hoy.